Descripción:
Mereces el tiempo necesario para reunir fuerzas, para restaurar energías y poder mirar la vida con perspectiva. La práctica de yin nos invita a desarrollar una cualidad de confianza y paciencia. Mientras hacemos esto entendemos que en la espera hay un espacio para procesar los hechos que ocurren en nuestra vida.
Empezamos esta práctica con una técnica de auto-masaje que nos sirve para ablandarnos y exhalar con calma. Cuando el cuerpo se suaviza, también lo hace la mente. Seguimos con un par de posturas que estimulan puntos de acupuntura importantes. Trabajamos con la respiración, el sistema nervioso y otros escenarios para el cuerpo. Acabamos con una postura restaurativa utilizando soportes para darnos este espacio de encuentro.
Necesitas: Dos Bloques, Un cojín o almohada, una manta.