Descripción:
La zona central del torso suele hacerse rígida por la falta de movimiento en nuestro día a día. Este espacio comprende la espina dorsal torácica, costillas y centro del pecho. Mucha musculatura profunda y superficial está involucrada en la movilidad de esta zona, siendo no solo el movimiento del cuerpo si no también la respiración, una gran aliada para el trabajo aquí. La forma en que nos sentamos, en que respiramos y la carga de estrés y trabajo tanto como las emociones que estemos viviendo pueden afectar a la movilidad de esta parte del cuerpo. Sin movilizar estos tejidos, influimos aún más en cómo respiramos y como nos movemos entrando en una espiral que se retroalimenta.
Esta práctica es perfecta para tomar consciencia de los pequeños movimientos que pueden liberar esta zona. Prestamos atención al nivel de tensión que ofrecemos a la hora de respirar en las posturas para encontrar suavidad que movilice el cuerpo desde el interior hacia afuera. Media hora de movimiento suave y consciente que nos permita reconocer los espacios de difícil acceso.
Foco: Espina dorsal torácica, diafragma, torsiones, movilidad, hombros, respiración consciente.
Necesitas: Una manta gordita o algo parecido.
Duración: 30 min
Nivel: Intermedio
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5 comentarios en “Espacio en el Centro. Movilidad Suave.”
QUé guay Cris, he vuelto a hacer esta clase después de más de tres años, y me ha gustado tanto… Gracias
¡Bea! ¡Qué bien! Me encanta cuando repetís prácticas con tanto tiempo de diferencia.se notan cambios, se percibe el cuerpo con más detalle y esto, aunque a simple vista parezca trivial, es realidad una capacidad que marca la diferencia en nuestra práctica y en la gestión emocional. Me alegro mucho de tus palabras.
Gracias, Cris. Qué clase tan agradable. Me gusta mucho la postura sobre la manta, y luego al quitarla también sentir el apoyo en el suelo más firme. Las dos sensaciones son geniales.
Profundo bienestar en cuerpo y mente. Habiendo abierto la jaula al pajarito de mi respiración. Fluye mucho más libre.
Revitalización y serenidad.
Efectivamente, el contacto íntimo en lo simple es mucho más reparador y válido que una «gran postura»
Feliz día. Namaste.
No tengo muchas palabras que decir al respecto. Gracias por esta sensibilidad y agudeza en la explicación de lo que ha significado esta práctica. Me alegro mucho de leerte.