Al hablar de Yoga podemos remontar el tiempo 3.500 años cuando en tierras del actual Pakistán y el oeste de la India, los miembros de la cultura Harrappan se sentaban en posición de loto y meditaban.
A lo largo de todo este tiempo la práctica ha ido evolucionando pero mantiene la misma esencia.
Yoga significa literalmente, Unión.
Los primeros yoguis entendían la práctica del Yoga como un conjunto de disciplinas físico-mentales destinadas a conseguir la perfección espiritual y la unión con el Absoluto.
Hoy en día la mayoría de la gente se acerca a la práctica de yoga en búsqueda de la obtención de un cuerpo más fuerte, flexible y en forma. A menudo ocurre que no tardan en encontrar otros beneficios.
Sea cual sea la razón que nos lleva a practicar yoga y a beneficiarnos de él, me gusta pensar que en el momento en que ponemos los pies sobre la esterilla y nos preparamos para nuestra clase ya estamos generando Unión. Unión con todos aquellos que hace cientos de años practicaron de la misma manera que estamos practicando ahora.